jueves, 27 de marzo de 2014

Inside Llewyn Davis, la odisea de la realidad


Inside Llewyn Davis o Balada de un hombre común es justamente eso, la historia de una semana en la vida de un músico que busca sobrevivir a la escena folk neoyorkina de los años sesenta. Repleto de situa­ciones y personajes inconexos, Llewyn Davis se su­merge más y más en el fracaso como músico, como amante y como persona en general, dándonos una clase de cruda realidad y donde los cambios repentinos de suerte no tienen lugar. Cinta de los hermanos Joel y Ethan Coen, conocidos relatadores de historias atí­picas, llenas de humor negro y situaciones absurdas.



Las principales cualidades del relato son la gran actuación del protagonista Oscar Isaac, las canciones folk tocadas en su totalidad y compuestas por el direc­tor musical T-Bone Burnett, además de todos los ele­mentos que llegan a sumergirnos en la época, inclu­yendo su impecable calidad técnica y su fotografía de colores pasteles, por la cual fueron nominados al Óscar 2013. Son atractivas las situaciones tragicómicas que abundan (desde hijos no deseados, suicidios o anima­les perdidos), una marca registrada de sus directores que sienten placer al llevar al extremo la situación de sus protagonistas.


Las debilidades provienen de la pérdida de fuer­za de la narración y de las situaciones y persona­jes que no aportan nada nuevo a la trama, como es la actuación de John Goodman, que pronos­ticaba un cambio de suerte en el protagonista, pero que termina siendo su antagonista como la mayo­ría de los personajes. Un film no apto para todos, y aunque haya sido aclamado por la crítica francesa, no llega a ser lo su­ficientemente impactante para consi­derarse un título de referencia.




martes, 4 de marzo de 2014

12 años de esclavitud, la crudeza de la tragedia humana

Ganadora a mejor película en los Oscars 2014:


Película basada en un libro escrito por uno de los pocos negros libres que fue secuestrado y vendido como esclavo. A cargo del director inglés negro Steve Macqueen, que utiliza esta inusual situación para relatar la brutal historia, no solo de un hombre, sino de toda una raza que busca supervivir de cualquier manera ante los opresores blancos. 



El tema ha sido tocado en innumerables películas, pero el mensaje innovador de Macqueen es la naturaleza de supervivencia del negro, donde no prevalecen los más fuertes, los más honestos, sino que la clave consistía en ser frío, calculador, indiferente con el prójimo y hasta cobarde, para no morir. Entendemos que el justo, el resignado que llora por su familia, o aún el más trabajador, no sobrevivía, ya que la  compasión no existía. 





El protagonista, Salomon Northup, llevado a la pantalla por la desgarradora actuación del inglés Chiwetel Ejiofor, plasma el abrupto cambio de vivir cómodamente con su familia y hacer lo que le gusta,  a ser despojado de todo tipo de dignidad y reducido al nivel del mas desdichado animal que aprende a aceptar las torturas y vejaciones para encontrar una salida. Mcqueen, al igual que su anterior filme Shame (2011), nos ofrece una película fría, explicita y cruda, evitando heroísmos falsos del típico estilo condescendiente de Hollywood. 





Se caracteriza por ofrecer situaciones sin digerir, mostrando planos quietos, ricos en expresiones donde la mirada del sufrido personaje se une con la del público. Con una banda sonora impecable a cargo del reconocido Hans Zimmer (Gladiador, Peal Jarbor) y con la ayuda de los cantos (el inicio del góspel) de los esclavos. Resalta la actuación como esclava de la recién descubierta y ganadora del Oscar a mejor actriz de reparto,  Lupita Nyong'o y Michael Fassbender como el cruel hacendado.  4/5